Ante la gran competitividad que afrontan las compañías en la actualidad, cada vez cobra mayor relevancia que la gerencia cuente con los conocimientos y habilidades para crear valor en el día a día. Ante lo anterior, muchas compañías en España persiguen la maximización del beneficio neto como objetivo financiero, por lo cual se centran en aumentar los ingresos y reducir los costes y gastos. Desafortunadamente, el beneficio neto no refleja el valor creado por parte de la compañía. Esta inadecuada definición del objetivo financiero ha llevado a muchas compañías a tener problemas de liquidez y a destruir valor, en lugar de crearlo,
Las habilidades y conocimiento para gestionar financieramente la compañía con el objetivo de crear valor, buscan abordar preguntas como: ¿Cuál debe ser el objetivo financiero de mi compañía? ¿Qué relación tiene la rentabilidad con la creación de valor? ¿Cómo los activos ociosos tienen impacto en la liquidez de la compañía? ¿Por qué el beneficio neto no debe ser empleado para determinar el valor de los dividendos que la compañía va a pagar? ¿Cómo determinar si la compañía está en capacidad de pagar la deuda que desea tomar? ¿Bajo qué circunstancias no es atractivo que mi negocio siga creciendo? ¿Qué indicadores financieros son los más relevantes para gestionar un negocio?
La gerencia financiera de las empresas está cambiando. Además de la preocupación por los resultados del período reflejado en indicadores como los márgenes de beneficio, la relación precio-ganancia y el crecimiento en las ventas y los beneficios netos, entre otros, los empresarios y gerentes están dirigiendo su atención hacia aquellos aspectos que tienen relación con las perspectivas de largo plazo de las entidades que poseen o administran, las cuales no pueden desligarse del propósito de aumento del valor de la empresa.
Cuatro factores han contribuido a la preocupación por la generación de valor y en particular por la Gerencia del Valor:
- El flujo mundial de capitales.
- El reto que plantea la apertura
- Las privatizaciones
- La necesidad de mejores medidas de evaluación del desempeño.
La creación de valor en la empresa se promueve de tres maneras:
- A través del Direccionamiento Estratégico.
- A través de la Gestión Financiera
- A través de la Gestión del Talento Humano.
Estas tres alternativas de gestión agrupan a su vez, los procesos que hacen parte de lo que se denomina El sistema de creación de valor para los propietarios, y que son los procesos que deben implementarse para garantizar el fomento de la cultura de la gerencia de valor en la empresa.
Si el objetivo gobernante de una organización es la permanente creación de Valor para sus propietarios lo mínimo que debe enseñársele a sus miembros es la forma en que las decisiones que toman conducirán el alcance de dicho objetivo.
Este proceso debe enfocarse hacia cuatro importantes aspectos:
- Generar preocupación e interés por los conceptos asociados con el valor.
- Lograr que las personas comprendan la importancia de dichos conceptos.
- Lograr que los integren en las decisiones del día a día.
- Diseñar un sistema de comunicación basado en la repetición, el refuerzo, la recepción y la redundancia para lograr que el lenguaje de la empresa sea el lenguaje del valor.
De este modo las decisiones orientadas a la optimización de los recursos y alcanzar el objetivo marcado se clasifican en cuatro grandes categorías: Operativas, Inversión, Financiación y Dividendos.