Es importante tener en cuenta que estas regulaciones son específicas para Europa. En los Estados Unidos, la legislación es más flexible y se permite el envío de correos electrónicos comerciales no solicitados sin restricciones. Sin embargo, incluso si te encuentras en Estados Unidos, se recomienda seguir estas prácticas para enviar correos sin ser invasivo y establecer una conexión más auténtica con tus destinatarios ¡y aumentar tus ventas!
Revisa cómo recopilas los datos
Las leyes de protección de datos (LOPD y RGPD) establecen las bases legales para recopilar información personal, en este caso, los datos de contacto de las personas.
Es legal recopilar direcciones de correo electrónico cuando: Los usuarios te dan su consentimiento: esto generalmente se obtiene a través de formularios de contacto y casillas de consentimiento (no se acepta el silencio ni las casillas ya marcadas). Los datos provienen de fuentes públicas y accesibles: directorios telefónicos, perfiles públicos en redes sociales, páginas web, listas de colegios profesionales, entre otros.
Cómo enviar correos de forma legal
La LSSICE es el reglamento que afecta la forma en que envías estos correos electrónicos.
No puedes bombardear publicitariamente en el primer correo electrónico si las personas no te han autorizado previamente. Por lo tanto, el primer contacto debe ser sin fines comerciales.
No puedes enviar correos sin ofrecer a los destinatarios la opción de darse de baja de tu lista de correos.
En resumen, estos son los consejos fundamentales para enviar correos en frío cumpliendo con la normativa:
– Recopila direcciones de correo electrónico de fuentes públicas, como adquirir correos electrónicos que se encuentren listados de forma pública en internet.
– Evita hacer promoción en tu primer contacto. No comiences el correo electrónico con mensajes de «¡CÓMPRAME, CÓMPRAME!» En su lugar, intenta ser ingenioso, natural y evitar sonar demasiado comercial. Tu objetivo debe ser establecer relaciones, en lugar de parecer que estás vendiendo (que es lo que realmente debes lograr).
Una forma sencilla de asegurarte de cumplir con la normativa es ofrecer ayuda y valor en tu primer correo electrónico. Ofrece soluciones a personas que puedan necesitar tus productos o servicios. El llamado a la acción en el correo en frío puede dirigir a los destinatarios a contenido de valor que hayas creado, como un blog, video instructivo o podcast, o incluso puedes invitarlos a que te respondan o te llamen.
Vende sin vender.
Lo que buscas son relaciones duraderas. Las ventas se producirán más adelante, después de esta primera interacción o a través de la información de valor que has compartido o a través de tu firma de correo electrónico (donde has incluido tu sitio web, LinkedIn y datos de contacto).
Añade un texto legal al final de tus correos electrónicos. En este texto, debes informar a los destinatarios que tienen la opción de darse de baja para dejar de recibir correos.
Recuerda que lo más importante es tener la certeza de que tu idea o proyecto puede ser de gran ayuda para las personas detrás de esas direcciones de correo electrónico.
Conclusión
El cold emailing es una de las herramientas más efectivas y rentables que puedes utilizar para captar clientes potenciales, hacer crecer tu negocio y aumentar tus ventas. Además, te costará menos dinero que cualquier otra forma de promoción.
Sin embargo, se debe hacer con respeto a la normativa vigente y a los derechos e intereses del destinatario. De lo contrario, se puede incurrir en infracciones que pueden tener consecuencias legales graves.
Para aprovechar al máximo esta estrategia, es fundamental contar con una lista de correos electrónicos buena y segmentada.
Abraham Amor Chaparro