La situación de Finca Constancia la convierte en un hábitat excepcional por el microclima que se genera al estar situada a las faldas de la sierra de Gredos y los Montes de Toledo, y en las cuencas de los ríos Tajo y Alberche. Además, colabora que el clima de la finca tenga la variación de temperatura entre el día y la noche tan buscada en el periodo de maduración.
La finca está constituida por diferentes tipos de suelo que, unido al microclima que se genera, posibilita un entorno privilegiado para el cultivo de la vid y con altísimo potencial para producir vinos singulares. De esta forma, el viñedo, de 200 hectáreas de extensión, se encuentra dividido en 82 parcelas.
En cada una de estas parcelas se cultivan diferentes variedades de uva tinta, como Tempranillo, Syrah, Cabernet Sauvignon, Petit Verdot, Cabernet Franc, Graciano y Garnacha; junto con las de uvas blancas Moscatel, Verdejo, Sauvignon Blanc y Chardonnay. Esta amplia gama posibilita la obtención de vinos complejos y únicos, así como la trazabilidad del vino que procede de cada parcela, que se recoge en su nombre.
Y este cuidado se traduce, también, en una viticultura cuidadosa y basada en técnicas tradicionales. Por ejemplo, la plantación en espaldera alta, sistema que le aporta un buen aprovechamiento de la luz solar a la vez que crea sombra en la calle contigua durante los días más largos del verano.
El diseño de bodega está pensado hasta el último detalle para mantener y respetar la riqueza del viñedo, los suelos y el clima. Su construcción es el fiel reflejo de la viña.
Gracias a su diseño, se puede hacer un recorrido visual de las etapas del vino. La parte de los fermentadores de acero inoxidable, la primera estancia que recibirá el vino y donde comenzará a tomar personalidad; la parte de las barricas de madera, que hace referencia a la crianza del vino y la última estancia, y la última estancia, la parte del cristal o zona de embotellado, donde el vino reposará antes de llegar a nuestros paladares.
Finca Constancia es el destino de todos aquellos que aman el vino y que disfrutan con él. Una bodega para deleitarse paseando por los viñedos, degustando los diferentes vinos o viviendo la vendimia, y creando y elaborando tu propio vino a partir de la selección de las diferentes variedades de vides.
Visitar Finca Constancia es más que un viaje al vino. Es un recorrido por LUGARES MÁGICOS como el jardín experimental, donde encontraremos plantadas distintas variedades de uva (Petit Verdot, Syrah, Cabernet, Malbec, Zinfandel, Montepulciano, Barbera,…) con diferentes sistemas de conducción de la vegetación en el viñedo y otras formas de densidades de plantación. Aquí es donde nacen muchas de las ideas innovadoras y creativas que se llevarán a cabo en el viñedo, es donde empieza a germinar un “nuevo vino”.
Otro de estos “lugares mágicos” es la Bodega Experimental: Laboratorio de sueños. Se trata de una microbodega funcional y totalmente tecnológica. Tiene el objetivo de analizar la adaptación de las variedades tintas plantadas en el “Jardín Experimental” fermentándolas y vivificándolas de forma independiente para estudiar su potencial aromático.
Lugar donde se unen creatividad, innovación y pasión por la vid y el vino, en un entorno sostenible. El proyecto “5+5 cuidando el Planeta” es el nuevo reto de sostenibilidad de la compañía, que destaca el compromiso y el cuidado del medio ambiente a través de un consumo responsable de los recursos naturales.